domingo, 9 de noviembre de 2008

La crítica







En verdad los seres humanos somos unos animalitos muy extraños, capaces de las màs fabulosas maravillas y de los màs tremendos desastres, pero entre nuestras incapacidades màs notorias està la intolerancia cuando nos señalan cualquier defecto, cualquier desliz, lo cual contrasta con lo predispuestos que estamos a protestar airados ante las ineficiencias de los otros, como si nosotros no fuéramos parte de esos otros.
La parada del ómnibus, la cola en la carnicería, la sala de espera del hospital, la compra en la shopping, la sobremesa en casa, la conversación con la vecina, el espectáculo humorístico, son ámbitos del juicio crítico sobre tantas cosas que no funcionan como deberían porque entre todos de alguna manera contribuimos a ello, aunque no queramos reconocerlo.
En la parada de ómnibus la dependienta se queja de la grosería del chofer, en la shopping o la bodega el chofer de ómnibus se molesta con el maltrato de la dependienta o el bodeguero, en la oficina de la Dirección de viviendas se comenta de la mala atención en los servicios pero obvian las quejas por las demoras de los documentos que se necesitan, los basureros censuran la suciedad de los ciudadanos y estos el inadecuado trabajo de comunales y así se va formando un círculo vicioso que llega hasta la creación artística que por naturaleza tiene una vocación cuestionadora de la realidad, pero que tampoco asume con serenidad ningún juicio de valor que se desmarque de los aplausos.
Por supuesto que criticar no debe ser equivalente a ofender, pero no pocos se sienten ofendidos simplemente porque se le expresa que su empeño no resultò como aspiraba, o que no se empeñó suficientemente en conseguirlo, porque simplemente se le dice una verdad que no quieren escuchar y se escudan en las màs diversas justificaciones para ripostar en vez de reflexionar en cómo podrían aprovechar las opiniones pocos favorables para mejorar la tarea que realizan y mejorarse a si mismos.
Muchas son las razones por las cuales carecemos de una cultura de la crítica, el debate, la polémica, el diálogo, pero el camino màs largo comienza con el primer paso, como asevera un proverbio chino y en eso creo que los creadores artísticos deben ser los facilitadores de esa travesía promoviendo las màs diversas opiniones y asumiendo los criterios adversos con sabiduría, teniendo en cuenta que una opinión, incluso por muy especializada que sea, no decide por si sola los valores o defectos de una obra, pero merece ser tenida en cuenta.
Tanto la sociedad como el arte necesitan de ese análisis constante de cómo funciona el quehacer cotidiano, para encontrarle solución a los problemas de cada día. Muchos creen que carecen del poder para hacer cambiar las cosas y esa es la causa de cierta inercia que se aprecia en esos silencios antes las ineficiencias en la vida y en el arte, pero cada ser humano tiene el mayor de los poderes, el de poder lograr transformaciones en si mismo para conseguir producirlas en el entorno.
La verdad no està afuera como señala un popular programa televisivo, està dentro, y para descubrirla y hacerla valer, la crítica o juicio de valor, la diversidad de opiniones, el diálogo entre posiciones diferentes es indispensable. Y el que quiera discrepar o coincidir que lo exprese. Aquí se respeta la opinión propia.

1 comentario:

Mayda dijo...

DESOHAR LAS IDEAS
Que importancia tiene que los artistas no critiquen a la sociedad??. Sera que no se quieren meter en problemas con una sociedad que no acepta criticas.... Siempre me ha parecido que tu eres una periodista profunda y en ocasiones hasta perversa. Pero ahora me doy cuenta que es facil hacer "criticas epocales" cuando se tiene las "espaldas cubiertas". En ese articulo que escribes te veo floja, e incapaz de coger al "Toro por los Cuernos" cuando convocas a la sociedad y a los artistas para que hagan criticas, que tu nunca has hecho. Bien se sabes que la revolucion "se fue a bolina" como la del 30;y en estos momentos queda solo un modo operandi sin filosofia ni ideologia. Hablas de dialogo entre posiciones diferentes, hablas de diversidad de opiniones, dices que el que quiera discrepar que lo exprese y que la sociedad se mantiene con "cierta inercia".Con una "inercia cierta" diria yo. Cuando el primer congreso de los Artistas y Escritores se dijo: "Con la Revolucion Todo,sin la Revolucion Nada". Por eso la gente esta cautelosa, porque oficilmente no se ha dicho lo contrario. Si tu quieres ser una periodista "open minded" entonces empieza a escribir al "duro y sin guantes", y no deshojes las ideas, porque me parece que tu articulo es como para revolver un poquito sin hacer olas. Y eso me recuerda. el cuento del hombre que estaba en el infierno con la mierda hasta el cuello y decia: - por favor no hagan olas -